Hola a todos, lectores y lectoras
Hoy vengo a hablar de algo diferente a lo que suelo tratar aquí, aunque realmente cuando lo reflexiono me doy cuenta de que el tema es el mismo: hablo desde mi visión de escritor.
Últimamente me ha dado por formarme literariamente: con esto me refiero a que voy a cursos de literatura, ya sea de personajes, trama... etcetera. Tras ver diferentes profesores y diferentes materias creo que puedo hablar con cierto... ¿saber? Sí, algo así.
Yo lo que sé de la escritura es porque lo he probado y lo he practicado: no soy de esas personas que deben estudiar un manual de "cómo escribir" para ponerse a ello, sino que he abierto un documento word y, año tras año y práctica tras práctica, he conseguido perfeccionarme. Y claro, no olvidemos ese tutor que siempre se debe tener: la lectura.
Seguramente todos los que me leéis vais de ese corte: preferís probar antes que estudiar. Tengo que contar que he asistido a un curso en donde he aprendido, no os voy a engañar: comparas textos que son calificados como buenos, los analizas y ves los pros y los contras, los puntos fuertes y los puntos débiles.
Pero hay un momento en que los literatos van más allá: teorizan la escritura. Cuando digo teorizar me refiero a explicar cómo se escribe una novela y lo que debe tener. Me he encontrado a mi misma leyendo uno de mis principios corregido por ese tipo de corte teórico, donde me dicen que está mal porque en el momento del comienzo no hay que hacer tal cosa, pero otra sí.
La literatura es un maldito alma libre: lo defenderé así siempre, aunque me haya dado cuenta en las últimas semanas. ¿A quién se le ocurrió teorizar la literatura? Vale que es muy frustrante ver novelas fáciles de escribir que llegan al éxito, pero la gente busca lo que busca: actualmente se quieren buenas tramas, tramas de acción que te mantengan en vilo con personajes que te enamoren y que sufran. Ahora mismo poca gente quiere literatura donde sean 500 páginas hablando de nada o hablando de todo. Claro que hay gente que le gusta, pero la literatura se mueve por la oferta y la demanda, como el habla: los tiempos cambian y los gustos también, y con los gustos la forma de escribir de un novelista.
Por eso me considero fiel opositora de teorizar la literatura, porque no hay trucos ni pasos que seguir, sino simplemente dejarse llevar, que para eso está el arte. Y ese dejarse llevar se forma de andar caminos, recorrerlos una vez sí y otra también, no estudiándose el mapa de las calles y luego yendo por el camino más corto. Eso es como hacer trampa :D